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La Podología es la carrera sanitaria encargada del estudio, diagnóstico y tratamiento de las patologías, enfermedades y alteraciones que afectan al pie. Sus tratamientos abarcan desde el diagnóstico, prevención, administración y aplicación de tratamientos farmacológicos, ortopodológicos, físicos y quirúrgicos en las enfermedades y deformidades de los pies.
A continuación se muestran nuestros servicios de podología.
La quiropodia es un tratamiento sanitario que solo puede realizar el podólogo y el cual consiste en la eliminación de callos y durezas, cortar y fresar uñas, tratar uñas encarnadas, problemas de hiperhidrosis, etc.
El tratamiento del engrosamiento y endurecimiento de la piel se realiza con bisturí, su aparición es debido a diferentes causas biomecánicas, como el exceso de fricción o de presión. En el tratamiento de las uñas, éstas pueden verse alteradas por el uso de calzados inapropiados que las comprimen, dando lugar a un cambio en su forma y grosor. Pero también hay otras patologías que pueden provocar este desencadenante como son enfermedades vasculares, enfermedades sistémicas como la diabetes, malos hábitos como fumar, alteraciones tiroideas o incluso la aparición de pequeños tumores.
Además, durante el tratamiento también se pueden detectar la aparición de hongos en las uñas y en la piel (pie de atleta), papilomas, exceso en la sudoración, uñas encarnadas, etc.
Es importante realizar, al menos, una visita anual al podólogo para inspeccionar nuestros pies y poder detectar posibles dolencias o patologías, y así poder poner tratamiento si fuese necesario.
La silicona es un polímero perteneciente al grupo de los elastómeros que por sus características de elasticidad y resistencia son utilizados en muchos tratamientos ortopédicos y ortoprotésicos.
En Podología son utilizadas muy a menudo en protección de los dedos, para alinear dedos en garra o juanetes y como elementos sustitutivos en caso de amputaciones. Se realizan directamente sobre la piel del paciente y se las llevan en el acto.
Las infecciones por hongos en las uñas, también conocidas como onicomicosis, ocurren con mayor asiduidad en los pies que en las manos, observándose con mayor frecuencia en ancianos, diabéticos, inmunodeprimidos, personas que acuden a piscinas, gimnasios o que por cuestiones laborales utilizan zapatos que no transpiran dando lugar a ambientes húmedos y calurosos.
En general estas uñas son indoloras, pero presentas unas peculiaridades o signos que las hacen ser indicativas de una posible infección:
Las causas más comunes de este patógeno en las uñas son infecciones secundarias de hongos en la piel como el pie de atleta, un alto porcentaje de estos pacientes derivarán en ambas patologías. Las esporas encargadas de producir las infecciones se encuentran en el suelo, duchas, calcetines y zapatos. Su transmisión es por contacto directo y es altamente contagioso.
Para elegir el tratamiento efectivo para cada paciente es necesario la realización de un cultivo de una pequeña porción de uña, para averiguar cuál es exactamente el patógeno que la está dañando.
Una vez obtenidos los resultados y antes de empezar el tratamiento ya sea el oral o tópico es conveniente la realización de una quiropodia, en la que la uña se rebajará al máximo para eliminar el exceso de grosor y disminuir la carga micótica, siendo más eficaz la absorción del tratamiento.
Los papilomas o comúnmente llamados verrugas plantares, son producidos por el virus del Papiloma Humano (VPH) y está muy relacionado con el estado del sistema inmunitario del organismo, por lo que es muy común que aparezcan al producirse un bajón de defensas, por ejemplo, un catarro.
Pueden aparecer por toda la piel, dependiendo de la zona de aparición tendrán un aspecto u otro. Por ejemplo, si esta tiene lugar en el pie su apariencia es similar a una dureza o un callo, por lo que habría que hacer un diagnóstico diferencial con ellas, en cambio si su presencia es en el resto del cuerpo, tiene aspecto de verrugas con pequeños filamentos que hacen que posean una textura áspera.
El papiloma suele ser doloroso, su aspecto es redondeado con puntitos negros llamados papilas, siendo posibles una o varias lesiones. Se contagia a través del contacto físico, siendo más común en niños y adolescentes que acuden a piscinas, gimnasios… pero también pueden producirse en adultos y personas con exceso de sudoración. La humedad hace que los poros de la piel se dilaten y faciliten la penetración de este virus. Tiene un periodo de incubación de hasta 9 meses aproximadamente.
Es importante consultar al podólogo si se nota la aparición de éstos y poner el tratamiento lo antes posible.
La reconstrucción ungueal se utiliza en todos los casos en los que la uña ha perdido su apariencia de normalidad, ya sea por diferentes tipos de malformaciones derivadas de:
En estos casos mediante la reconstrucción conseguiremos una protección para el lecho ungueal que permita la recuperación de la uña, sirviendo como guía para la misma mientras vaya creciendo. El material que utilizamos para recrearla es hipoalergénico y puede utilizarse tanto en adultos como en niños, teniendo una duración de 2 meses, en cuyo momento se eliminará o sustituirá por otra nueva.
Es una técnica utilizada en podología con la que conseguimos de forma limpia e indolora recrear la estructura de una uña sana presentando características similares a las normales en flexibilidad y resistencia, evitando así problemas secundarios como onicocriptosis o estéticos.
Todo ello se consigue mediante la utilización de un gel con componentes antifúngicos, que aplicamos encima de la uña lesionada, siendo el objetivo principal preservar el lecho ungueal (zona de adhesión de la uña) mientras ésta se encuentre dañada o ausente y evitar así infecciones por micosis (hongos).
Las uñas que intentamos recrear son translucidas, lo que nos permite observar el fondo del lecho ungueal o la uña dañada, de este modo comprobamos en todo momento su evolución. Esta característica junto al componente micótico son las principales diferencias entre las recreaciones de uñas en podología y los de centros de estética.
La diabetes está considerada una pandemia global debido a que los hábitos alimenticios han cambia a lo largo de la vida, siendo cada vez menos saludables, esto junto con el sedentarismo y el abuso de comidas procesadas, hacen que nos alejemos cada vez más de la dieta mediterránea y tienen el origen del problema.
El pie diabético engloba un conjunto de síndromes en los que la presencia de alteración en la sensibilidad (neuropatía), patología circulatoria (isquemia) e infección producen lesiones tisulares o úlceras debido a pequeños traumatismos, produciendo una importante morbilidad que puede llegar incluso a amputaciones.
La prevención es fundamental: visitas periódicas al podólogo, el cual realizará un estudio basado en la visualización de alteraciones en la piel, callosidades, pérdida de la sensibilidad, toma de pulso, que nos indicarán la afectación de la diabetes en el pie; además también es importante la higiene personal, el calzado protector y la educación sobre el cuidado diario. Un diabético nunca debería intentar eliminar por sí solo los callos y durezas de su pie, la utilización de cortacallos o productos químicos como callicidas, pueden provocar heridas, producir erosiones o quemaduras en la piel, que sumado a su falta de sensibilidad las hace indoloras por lo que no se tratan, dando lugar a que deriven en úlceras.
A lo largo de la vida nuestros pies han soportado mucho peso, han caminado largas distancias y sus músculos, huesos, articulaciones... también se ven afectados por el envejecimiento. El cuidado de los pies durante la tercera edad, junto con tratamientos de plantillas personalizados adecuados y/o ayudas para la marcha pueden mejorar la independencia del anciano, prevenir caídas y otros problemas asociados a la inmovilidad.
En ésta etapa de la vida son más frecuentes la aparición de callos, el engrosamientos y encarnación de las uñas, además de la aparición de hongos, debido a que el sistema inmune puede encontrarse debilitado para controlar a los patógenos.
Por otro lado, el arco suele aplanarse, como consecuencia del aumento de la flexibilidad del tejido conectivo, dando lugar a fascitis plantar y tendinitis, y el tejido adiposo (relleno graso de la piel) que hace la función de amortiguador natural va haciéndose cada vez más fino, por lo que es más frecuente las metatarsalgias y neuromas. Todo ello puede contrarrestarse mediante nuestras plantillas ayudando a compensar disfunciones de otras partes del cuerpo como tobillo, rodillas y espalda.
Enfermedades como la artrosis y la artritis se hacen evidentes en esta etapa de la vida, provocando deformaciones como dedos en garra o martillo, reduciendo así la movilidad de pie.
Los problemas circulatorios junto con la diabetes aumentan con la edad, por lo que es importante tener un cuidado más exhaustivo de las extremidades inferiores.
Caminar bien en la tercera edad aumenta la autoestima, permite mantener una socialización satisfactoria y mejora notablemente la calidad de vida y salud.
En Sanipies Centro Médico ayudamos a tratar y minimizar las patologías que van surgiendo por el paso del tiempo no solo en lo referente a los pies sino, a todo el cuerpo. Ponemos a su disposición nuestro equipo de profesionales para intentar paliar las dolencias y aumentar así la calidad de vida.
En los primeros años de vida, los huesos aún no están totalmente osificados. Por eso, si a esta edad se presenta alguna alteración del pie, es el momento adecuado de poder corregirlo. Por lo que es conveniente realizar en la infancia revisiones periódicas con el podólogo. Los pies de un recién nacido están formados principalmente por cartílago que se irán transformando en hueso durante su desarrollo y tejido graso (ligamentos, tendones y músculo). Por lo que son fácilmente moldeables frente a tratamientos correctores.
Una detección temprana de anomalías en el desarrollo del pie de los niños evitará problemas en la edad adulta, es a partir de los 3 años la edad aconsejable para realizar estudios biomecánicos de la pisada. El dolor de pies no es normal en niños, cualquier dolor que dure más de unos días e impida la marcha correcta ha de ser valorado por el podólogo.
El tratamiento siempre dependerá de la edad en la que el niño aparezca en la consulta y el tipo de patología que presente, siendo todos ellos personalizados, algunos de ellos pueden ser plantillas personalizadas correctoras, ortesis de silicona para dedos o estiramientos y ejercicios. Los posibles desequilibrios pueden ser:
Realizamos un exclusivo tratamiento del pie para pacientes que por sus características o patologías les es imposible desplazarse hasta nuestras instalaciones, llevando hasta su domicilio todos los materiales precisos para su completa satisfacción. El podólogo será el encargado de atenderle sus dolencias consiguiendo un alivio y ayudándoles en el mantenimiento, prevención y cuidados de sus pies.
Los tratamientos que ofrecemos son:
Es la terapia de elección cuando los tratamientos más conservadores como inmovilización, medicación oral, rehabilitación o plantillas a medida, no han dado los resultados esperados. La infiltración es una técnica mínimamente invasiva que actúa directamente en la zona lesionada, ayudando así, a mitigar o eliminar el dolor e inflamación.
Esta terapia ayuda a estimular a los tejidos deteriorados para que se produzca una autoreparación del mismo. Y el paciente mejore su calidad de vida.
Las infiltraciones están indicadas para los siguientes casos:
En Sanipies ponemos a su disposición este tratamiento que tantos efectos positivos posee a la hora de tratar procesos inflamatorios como son:
Muchos de los problemas que padece el pie no pueden solucionarse con los tratamientos convencionales y es necesario recurrir a la cirugía. Los procedimientos son de régimen ambulatorio y no necesitan de hospitalización. Las cirugías se realizan mediante anestesia local, lo que minimiza el riesgo de sufrir otras complicaciones, siguiendo las máximas condiciones de asepsia y el debido procesamiento de la muestra recogida, garantizando así el trato profesional e individualizado para cada paciente en todo momento.
En Centro Médico Sanipies ponemos a su disposición las técnicas más vanguardistas y contrastadas en cirugía del pie para poner fin a estos problemas. Somos especialista en intervenciones de:
Consiste en un análisis del pie tanto en posición estática como en dinámica, y su relación con las diferentes estructuras del miembro inferior como son rodilla, cadera y columna. Permite detectar todas las anomalías que se produzcan al caminar y que dan origen a diferentes lesiones o patologías, pudiendo solucionarse o bien prevenir en un futuro.
El estudio consta de tres partes, cada una de ellas imprescindibles para conseguir toda la información necesaria y llegar así al diagnóstico de una patología o para obtener un mejor rendimiento físico durante la práctica deportiva.
Es recomendable hacer revisiones anuales para evaluar la evolución pre y post tratamiento de diversas patologías. En Centro Médico Sanipies una vez realizado el estudio biomecánico, y analizados todos los datos obtenidos, en caso de ser necesario, se propone un tratamiento personalizado al paciente, a través de fisioterapia, ejercicios, o soportes plantares (plantillas).
Puesto que no todos los pies son iguales estudiamos su caso de forma individual. El podólogo es el profesional indicado para identificar y diagnosticar su problema, dando la mejor solución posible para el mismo. Puesto que muchas de las patologías están directamente relacionadas con la pisada, una mala deambulación puede ocasionar esguinces, fascitis plantar, Neuromas de Morton, pie cavo o plano, espolones, metatarsalgias, lumbalgias, etc, además en los casos de pérdida de tejido adiposo (grasa plantar) las plantillas pueden ayudarnos a compensar esa falta de amortiguación.
Las plantillas 100% personalizadas se realizan mediante los datos obtenidos del estudio biomecánico de la marcha y exploración del paciente, de esta forma podremos elegir los materiales que mejor se adapte para cada caso. Además, cabe la posibilidad de personalizarse con múltiples forros de colores a elegir por el paciente.
En Sanipies todas nuestras plantillas no solo se adaptan a los pies del paciente para permitir dar un correcto funcionamiento, sino que también ayudan a solucionar problemas en rodilla, cadera y espalda, mejorar nuestra actividad del día a día y en la práctica deportiva.
El deporte es una de las actividades más sanas que existe, pero también se pueden producir lesiones en el cuerpo debido a una alteración biomecánica durante la práctica deportiva.
Mientras realizamos deporte las estructuras del organismo se ven sometidas a un estrés excesivo, dichas estructuras hipersolicitadas sufren procesos inflamatorios, alteraciones en el trofismo, desgaste o rotura. Las lesiones más habituales son:
Puesto que el calzado no es el mismo para todos los deportes, las plantillas no pueden ser iguales. En cada actividad deportiva las necesidades a cubrir pueden variar en cuanto a la amortiguación, ajustes en el pie y estabilidad. La Podología deportiva está encaminada al diagnóstico, el tratamiento y a disminuir el tiempo de recuperación de las lesiones, aumentar el rendimiento deportivo y a la prevención de futuras lesiones tanto en el pie como en el tobillo, rodilla, cadera y columna.
En nuestro centro Médico Sanipies, ponemos a su disposición la podología junto con la fisioterapia, para poder estudiar y evaluar de manera conjunta cual será el método de trabajo más eficaz para solucionar su problema.
Estamos a su disposicion
