¿Alguna vez has notado que tus uñas están más gruesas de lo normal, tienen un olor extraño o se rompen con facilidad? Si es así, podrías estar sufriendo de una infección por hongos conocida como Onicomicosis. Pero no te preocupes, no estás sólo. Este problema es más común de lo que imaginas, y lo mejor de todo es que tiene solución.
En el presente artículo te vamos a contar todo lo que necesitas saber sobre el tratamiento empleado para sanar de esta molesta situación, desde el diagnóstico correcto hasta los mejores consejos para prevenirla. Así que, si quieres recuperar la salud de tus uñas, sigue leyendo.
¿Qué es la Onicomicosis y por qué ocurre?
La onicomicosis es una infección causada por hongos que afecta las uñas, principalmente las de los pies. Estos pequeños invasores encuentran en la uña un lugar perfecto para crecer, principalmente por las condiciones de humedad, calor y poca luz, que se presentan al usar zapatos cerrados y una incorrecta higiene.
Con el tiempo la infección puede hacer que las uñas se engrosen, se decoloren y se vuelvan quebradizas. En casos más avanzados, la uña puede desprenderse o acumular residuos debajo de ella.
Pero, ¿Cómo saber si lo que tienes es realmente onicomicosis? Aquí es donde entra en juego la realización de un buen diagnóstico.
Primer paso para recuperar tus uñas:
Antes de realizar cualquier tratamiento, es fundamental asegurarse de que se trata de onicomicosis y no de otra condición que pueda parecersele.
Ejemplo de condiciones similares: la psoriasis ungueal, el liquen plano o traumatismos repetidos en las uñas.
Para ello, los especialistas en podología suelen seguir dos pasos clave:
- Examen clínico: durante la consulta, el podólogo examinará tus uñas en busca de signos típicos de la infección por hongos. Esto incluye ver si están engrosadas, deformadas, si han cambiado de color o si hay desprendimiento. También revisará si hay acumulación de residuos debajo de la uña, lo cual es un indicador común de la presencia de hongos.
- Cultivo micológico: si el examen clínico sugiere que podría tratarse de onicomicosis, el siguiente paso es confirmarlo mediante un cultivo micológico. Esto implica tomar un pequeño fragmento de la uña afectada y analizarlo en el laboratorio. Aunque este proceso puede tardar alrededor de un mes, es la forma más precisa de identificar el tipo de hongo y descartar otras posibles causas, para posteriormente aplicar el tratamiento adecuado.
Tratamiento: Cómo combatir la Onicomicosis
Una vez que se ha confirmado la onicomicosis, es hora de actuar. El tratamiento para la onicomicosis puede variar, dependiendo de la gravedad de la infección, pero generalmente incluye dos enfoques principales:
- Antifúngicos tópicos: estos son tratamientos que se aplican directamente sobre la uña afectada. Vienen en presentaciones de esmaltes, cremas o lociones. Estos productos contienen ingredientes activos que ayudan a eliminar los hongos y a prevenir que sigan creciendo. Son ideales para casos leves o moderados, pero requieren constancia y paciencia, ya que los resultados pueden tardar meses en hacerse .
- Antifúngicos orales: si la infección es más grave o si los tratamientos tópicos no son suficientes, y no llegan a generar resultados en el tiempo estipulado; el podólogo puede recomendarte medicamentos antifúngicos orales. Estos son más potentes y actúan desde dentro del organismo, atacando directamente a los hongos. Sin embargo, suelen requerir un seguimiento médico más estrecho, ya que pueden tener efectos secundarios.
Consejos para prevenir la Onicomicosis
Como dice el refrán, “más vale prevenir que curar”, y en el caso de la onicomicosis, esto no podría ser más cierto. Aquí te dejo algunos consejos prácticos para mantener tus uñas sanas y libres de hongos:
- Mantén tus pies secos: los hongos aman la humedad, así que asegúrate de secar muy bien tus pies después de bañarte o nadar. Si sudas mucho, considera usar talco antifúngico o cambiar de calcetines durante el día.
- Usa calzado adecuado: evita los zapatos demasiado ajustados, o que no permitan una buena circulación de aire. Opta por materiales transpirables, y si es posible, alterna el calzado entre varios pares para que mantengas una buena higiene.
- Corta tus uñas correctamente: asegúrate de cortar tus uñas en línea recta sin dejar esquinas, y no tan cortas. Esto ayuda a prevenir que se encarnen y reduces el riesgo de que los hongos encuentren un lugar idóneo para crecer.
- No compartas tus utensilios de manicura o pedicura: los hongos pueden transmitirse fácilmente a través de herramientas contaminadas. Si vas a un salón de belleza, asegúrate de que estén debidamente esterilizados.
- Refuerza tu sistema inmunológico: una dieta equilibrada, rica en vitaminas y minerales, puede ayudar a tu cuerpo a combatir infecciones de manera más efectiva.
Tus uñas merecen la atención especial de Sanipies
La onicomicosis puede ser una condición molesta, que si no se trata a tiempo se puede extender y perturbar nuestro bienestar e imagen. Pero con un diagnóstico adecuado y un tratamiento constante, es posible recuperar la salud de tus uñas. Lo más importante es no ignorar los síntomas y buscar ayuda profesional ante la primera señal del problema. El centro médico Sanipies está disponible para darte soluciones podológicas si te encuentras en Madrid.
Recuerda que más allá del tratamiento, la prevención es tu mejor aliada. Con pequeños cambios en tus hábitos diarios, puedes reducir significativamente el riesgo de sufrir esta incómoda infección. Así que en Sanipies te animamos a cuidar de tus uñas y darles el amor que se merecen. Si tienes alguna duda o necesitas más información, no dudes en consultar a nuestra podóloga Verónica González sobre tu caso. Ella está allí para ayudarte a lucir unos pies sanos y bonitos.